¿Qué hubiera sido usted en vez de artista de cine, Dolores del Río?

«Bailarina. Solamente bailarina. De muy pequeña tuve esta afición, que llegó a proporcióname grandes disgustos con mis familiares. No querían ellos de ninguna manera que yo fuese artista. Ignoro el porqué; pero siempre vieron con malos ojos a todos los que se dedicaban en cuerpo y alma a cualquiera de estas bellas manifestaciones. Pero, no obstante, yo bailaba, a escondidas de mis padres. Algunas veces me exhibía en funciones benéficas, en tés, en fiestas populares... Y un buen día conocí al hombre que más tarde fué mi esposo. Creí entonces que aquella ilusión laca, la que alimentaba mis únicas esperanzas, se había esfumado para siempre; pero, no. La boda fué para mi el madero de salvación. Mi marido me llevó de la mano por el sendero del arte... hacia Hollywood. Y aquí estoy. Lo dicho, de no haber sido artista de cine, mi profesión ya la conoce... Bailarina.”

(Fuente: El Socialista, número 7471 de 15 de enero de 1933)