Claude Neal era en un granjero afroamericano de 23 años -en 1934- que fue arrestado en el condado de Jakson, Florida, el 19 de octubre de 1934 por, presuntamente, matar y violar a Lola Cannady, una chica blanca de 19 años, desaparecida desde la noche anterior. Se recogieron pruebas circunstanciales en su contra, pero ninguna de ellas lo vinculaba directamente al crimen. Cuando se conoció la noticia del homicidio, comenzaron a formarse turbas de linchadores blancos. A fin de mantenerlo a salvo, el alguacil del condado, Flake Chambliss, lo trasladó de varias cárceles, incluida la del condado de Brewton, Alabama, a 160 km de distancia. Ello no fue obstáculo, sin embargo, para que una turba compuesta por 100 hombres blancos de Jakson escuchara dónde estaba y lo trajera de vuelta al condado floridense.