Los efectos de la Inquisición todavía se perciben hoy en día
- Escrito por Jordi Vidal-Robert y dos más
- Publicado en Historalia

Encontramos que municipios sin registro de juicios de la Inquisición y municipios con una intensidad inquisitorial muy baja, en el tercil más bajo, tienen un mayor PIB per cápita hoy en día. Aquellos municipios con una intensidad media, tienen un PIB claramente menor y los municipios con la intensidad más alta, muestran un PIB marcadamente inferior.
Las magnitudes son significativas. En lugares donde no hubo persecución, la renta per cápita media es de 19 450 euros. En lugares donde la Inquisición fue más activa, la renta per cápita media es de 18 000 euros.
Nuestras estimaciones implican que, si la Inquisición no hubiera existido, la producción anual en España sería un 4.1 % superior (unos 811 euros) por persona.
Más persecución, menos educación
Para entender por qué la inquisición sigue afectando a la sociedad y la economía dos siglos después de su abolición, utilizamos datos de encuestas del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS).
La Inquisición puede tener un impacto sobre la educación ya que era especialmente suspicaz con personas con un nivel de educación elevado y con aquellos emprendedores o personas de clase media con un interés cultural y científico alto.
Nuestros resultados muestran que vivir en regiones que no fueron expuestas a la Inquisición está correlacionado con una proporción de educación universitaria 5.6 puntos porcentuales superior a regiones que tuvieron una intensidad media de la Inquisición.
Más persecución, menos confianza
La Inquisición también cambió las interacciones y comportamientos sociales. Las denuncias secretas por parte de conocidos hicieron más difícil la cooperación y la colaboración entre personas, disminuyendo la confianza entre ellas.
Una pregunta recurrente en las encuestas del CIS hace especial referencia a la confianza:
¿Diría usted que, por lo general, se puede confiar en la mayoría de la gente o que nunca se es lo bastante prudente en el trato con los demás?
Analizamos las respuestas de más de 26 000 personas entrevistadas entre 2006 y 2015 y encontramos que la actividad inquisitorial esta asociada con un menor nivel de confianza hoy en día. Los resultados son consistentes con diferentes métodos de cálculo y teniendo en cuenta las particularidades de cada año.
También tenemos medidas de asistencia a los oficios religiosos y encontramos una mayor religiosidad asociada con regiones donde hubo una mayor intensidad inquisitorial.
Más persecución, menos renta
Una posible objeción a nuestros resultados es que la Inquisición pudo ser más activa e intensa en regiones pobres.
Sin embargo, es bastante improbable. La Inquisición se autofinanciaba y uno de sus recursos económicos provenía de las confiscaciones y las multas que imponía. Aunque su misión era fundamentalmente perseguir la herejía, tenia incentivos para hacerlo allí donde había más riqueza. Así lo demuestra también nuestra evidencia. En general, los municipios más ricos sufrieron una intensidad más elevada.
La persecución inquisitorial de “herejes” es sólo un ejemplo de una intervención autoritaria en la vida de las personas. Otras instituciones a lo largo de la historia también han impuesto métodos intrusivos de control de pensamiento.
Aunque el sufrimiento de los acusados, los sentenciados y sus familias fuera el resultado más importante y doloroso de la persecución, nuestros resultados demuestran que sus efectos aún se perciben hoy en día.
Aún hoy, 200 años después de la abolición de la Inquisición española, las localidades más afectadas son más pobres, más religiosas y tienen un nivel de educación y confianza menores.
Jordi Vidal-Robert, Lecturer in Economics, University of Sydney; Hans-Joachim Voth, UBS Professor of Macroeconomics and Financial Markets, University of Zurich y Mauricio Drelichman, Associate Professor, Vancouver School of Economics, University of British Columbia
Este artículo fue publicado originalmente en The Conversation.