Publicidad
Lo llamamos publicidad y consiste ni más ni menos que en dar a conocer productos y servicios a la sociedad. El cómo se hace ya es otra cosa. En su forma, la ética de un anuncio radica en no impostar medias verdades o enteras mentiras, y soslayar cualquier tipo de agresividad.
Porque en publicidad la imagen se corresponde con el objeto publicitado, y si no, es engañosa. El contenido será la utilidad social de la empresa, así expresada.
La publicidad significa comunicación, de modo que un anuncio insertado en un diario es comunicación dentro de un comunicador. Nosotros “defendemos” unos valores muy concretos cuyo referente es el propio nombre de la publicación, ‘El Obrero’, y en ese sentido buscamos una correspondencia lo más honesta posible entre nuestra línea editorial y tu negocio.
Si nos buscas es porque rechazas todo lo que signifique discriminación o abuso en tu estrategia comercial y laboral; porque apuestas, en cambio, por la dignidad de una competencia sana, y porque abrazas ese concepto ecológico de crecimiento sostenible que engloba a las personas como parte del medio.
Con eso ya eres interesante para nosotros. Valórate y valora tu espacio en ‘El Obrero’. Anunciarte con nosotros será parte de tu marca.
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